#1 La cautiva del Comandante
Aliens.
Así es. Lo he dicho.
Lo sé, a mí también me parece una estupidez. Soy psicóloga (más o menos), así que se podría pensar que soy capaz de razonar para salir de este lío. Pero la realidad es que he sido abducida para convertirme en su reproductora, y no hace falta tener un título avanzado para reconocer que esto es una locura.
Pero estoy divagando.
Aparentemente, estos alienígenas están al borde de la extinción y me necesitan a mí y a mis compañeras cautivas para repoblar. Sí, nosotras. Supongo que es hora de pensar en un plan de escape antes de que me embarazen. Volveré más tarde.
Ojalá.
#2 La compañera del Monarca
Mi vida es una mierda.
Todas las demás criadoras humanas tienen machos que están locos por ellas, ¿pero tengo eso? No. Ni siquiera cerca. Mi alienígena es el futuro rey de la raza Dravians y créeme, se comporta como un auténtico imbécil.
Sí, claro, está buenísimo, pero eso no es lo importante.
De todos modos, todavía estoy intentando averiguar cómo conseguir que haga lo que quiero cuando me tropiezo con los planes de un asesinato. Decido involucrarme porque si alguien va a matar al príncipe sexy voy a ser yo. Sobre todo, si me llama su “namori” una vez más. Sea lo que sea que eso signifique.
Así que ahora intento mantenernos con vida, pero lo pone todo difícil con sus besos y su… bueno, digamos que será mejor que mantenga mi mente concentrada y mis piernas, er… boca cerrada.
#3 La criadora del Guardespaldas
Mi alienígena está comprometido.
Sí, todavía estoy tratando de entender eso.
Aparentemente, Kade y su prometida están desesperados por tener un bebé y ahí es donde entro yo.
Excepto que cuanto más tiempo estoy cerca de la pareja, más estoy segura de que este acuerdo no sea una buena idea. O de que la feliz pareja sea incluso feliz…
Hay una parte de mí que quiere quedarse embarazada lo antes posible para que me dejen en paz. Sin embargo, cada uno de los suaves toques y besos de Kade me obligan a cambiar de opinión.
Con la inminente guerra que se avecina, Kade insiste más en que me mantenga cerca en todo momento, pero cuanto más cerca estoy de él, más peligro corro de enamorarme de él.
#4 La amante del legislador
Quiero un bebé.
Sin embargo, ninguno de los extraterrestres me ha elegido como criadora. Hablando de un aumento de la autoestima. Claro que me horroricé como todas las demás cuando llegamos, pero después de estar aquí sin ninguna posibilidad de volver a casa he decidido adaptarme. Ahora sólo necesito encontrar un macho que esté interesado en tener una familia.
Entonces me toca hacer de niñera, sólo que éste no es un niño. En realidad, Kolton es una de las personas más poderosas del planeta, pero está mal y necesita ayuda. Cuando me ofrecen llevarme de vuelta a la Tierra a cambio de encargarme de este paciente, acepto de buen grado.
¿El único problema? Me he convertido en la nueva obsesión de Kolton y no está dispuesto a dejarme ir.
Y no estoy segura de querer irme de verdad…
#5 El sanador problemático
Quiere salvarme.
Braxton es médico y estoy segura de que el sentimiento de querer curar a la gente es algo natural para él. Lástima que no me interese.
Lo único que quiero es asegurarme de que mi amiga está a salvo y averiguar qué me pasa físicamente. Braxton puede ayudarme con eso, pero por las acaloradas miradas que me lanza, estoy segura de que quiere hacer algo más que examinarme.
Su descubrimiento médico nos sorprenderá a los dos y me encontraré en el lugar exacto que nunca esperé: confiando en él.
¿Podrá encontrar un remedio para curar mi alma herida o lo alejaré antes de que pueda ver lo rota que estoy?
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